El Celta de Vigo volvió a ser la bestia negra para el Barcelona. El cuadro de Luis Enrique volvió a sucumbir frente a los de Vigo y dejó escapar la posibilidad de subirse a lo más alto de la tabla, tras el empate del Real Madrid ante el Eibar.
Por Miguel Gámez
Por Miguel Gámez
En un partidazo, el Celta se impuso al Barça por 4-3, el Barcelona tuvo once minutos de intensidad volcado en el campo de los de Berizzo. Sin embargo, el Celta se repuso y antes de que el reloj marcara la media hora de juego, ya goleaba al Barcelona 3-0 con goles de Sisto, Aspas y Mathieu, en propia puerta.
Luis Enrique intentó reaccionar agitando el banquillo en el descanso e hizo ingresar a Iniesta por Rafinha. El Barça tuvo un cambio de imagen en el campo, llego el descuento por medio de Piqué; Neymar marcó de penalti y acorto distancias, pero cuando parecía que llegaba el empate, Ter Stegen cometió un error que le permitió al Celta sellar el cuarto. Sin darse por vencido, Piqué marcó el tercero y los últimos minutos se volvieron más intensos, pero no le alcanzó al Barcelona, quien como la temporada pasada, volvió a perder en Balaídos.
Luis Enrique intentó reaccionar agitando el banquillo en el descanso e hizo ingresar a Iniesta por Rafinha. El Barça tuvo un cambio de imagen en el campo, llego el descuento por medio de Piqué; Neymar marcó de penalti y acorto distancias, pero cuando parecía que llegaba el empate, Ter Stegen cometió un error que le permitió al Celta sellar el cuarto. Sin darse por vencido, Piqué marcó el tercero y los últimos minutos se volvieron más intensos, pero no le alcanzó al Barcelona, quien como la temporada pasada, volvió a perder en Balaídos.