Tremendo escándalo el que se ha hecho en España por los audios filtrados en los que se expone a Gerard Piqué, defensor del FC Barcelona y Luis Rubiales, presidente de la RFEF, negociando comisiones, gestionando convocatorias y cuestionando el VAR.
Por: Alejandro Mejicanos.
Por: Alejandro Mejicanos.
El fútbol español se encuentra en un momento de tensión y con muchísimas dudas sobre la lealtad del presidente de su Federación y uno de los defensores más prolíficos de su historia.
Luis Rubiales y Gerard Piqué están en el ojo del huracán después que el periódico, El Confidencial, publicara audios en los que se escucha a ambos personajes teniendo conversaciones sobre distintos temas: negocios con Arabia Saudita referentes a la Supercopa, una posible convocatoria del central a los Juegos Olímpicos de Tokio y un caso particular acerca del VAR.
Primero, la Federación Española de Fútbol (RFEF) negoció una comisión de 24 millones de euros para Kosmos, la empresa de eventos deportivos presidida por el defensor del Barcelona, por trasladar unos años la Supercopa de España a Arabia Saudita. Esos 24 millones, Piqué propuso repartirlos de la siguiente forma: "A ver, Rubi, sí es un tema de dinero, si ellos (Real Madrid) por 8 irían, hostia tío, se paga ocho al Madrid y ocho al Barça... a los otros se les paga 2 y 1... son 19, y os quedáis la Federación seis kilos, tío. Antes de no quedaros nada, os quedáis seis kilos. Y apretamos a Arabia Saudí y a lo mejor le sacamos... le decimos que si no, el Madrid no va... y le sacamos un palo más o dos palos más..."
Días después, Rubiales envía un audio a Piqué felicitándole por el acuerdo ya cerrado: "Geri, enhorabuena. Y no me refiero ni al partidazo de ayer ni a tu gol. Me refiero a que ya son más de las 12 y por lo tanto es firme el acuerdo con Arabia Saudí. Un abrazo, gracias por todo y aquí estoy para lo que necesites". Finalmente, se conoció que la Federación NO LE PAGÓ nada a la empresa de Piqué, pero sí le ayudó a que cobrar la comisión.
Segundo, Gerard Piqué le mandó un audio a Luis Rubiales para felicitarle por la clasificación de España a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, y de inmediato, aprovechó la ocasión para pedirle un favor: “Qué pasa, Rubi, ¿cómo estás? Estoy aquí en Bahamas y acabo de ver el partido de la sub-21 contra Polonia, ¡qué partidazo, hostia! Mira que la tenían difícil, ¿eh? ¡Dios! Cómo se han clasificado para los Juegos Olímpicos… Esta me la tienes que hacer, eh, Rubi, me la tienes que conseguir, hostia. Me hace una ilusión que te cagas jugar los Juegos Olímpicos. Y la tenemos que mantener muy en secreto, tío”.
Rubiales atiende la solicitud del defensor y promete respaldarle ante el entrenador de la selección Sub-21 de España: “Por supuesto, hay que mantenerlo en secreto y el míster [de la Fuente], si él confía, quiere y tira palante, yo encantadísimo. A mí me gustaría que vinieras hasta a la [selección] absoluta, que te necesitamos más. Yo encantado de echar una mano ahí”. Finalmente, Piqué no fue convocado a la Justa Olímpica.
Tercero, Gerard se comunica con Rubiales para quejarse por una mala decisión del VAR en un partido en Anoeta contra la Real Sociedad en la temporada 19/20: “Rubi, no han consultado el VAR y era penalti clarísimo. Y los del VAR tampoco han dicho nada. Nos han liado”. El presidente de la RFEF contesta al defensor poco después de la siguiente forma: “Sé que les han pitado uno dudoso en contra, que si es dudoso no entran ni para bien ni para mal, y sé que no han pitado uno, un agarrón a ti ¿no?, me han dicho. Pero los agarrones también, o es muy claro o tampoco entran. Pero bueno, lo veré después. Oye, si se han equivocado, tú sabes que estando yo por medio no hay ni ganas de perjudicar ni de beneficiar a nadie, ¿sabes?”.
Esta última conversación ocurrió enmedio de una disputa por el título de Liga con Real Madrid, y es que cuatro días después de ese partido en Anoeta, el Barca enfrentaba a los blancos con la obligación de ganar y el empate contra la Real Sociedad no les venía bien, por tanto, se presume que el defensor buscaba ayuda en el presidente para evitar errores arbitrales.
Hasta ahora, ninguna entidad se ha pronunciado acerca de iniciar algún tipo de investigación sobre estos casos, sin embargo, Piqué salió a aclarar todo en una extensa declaración que, básicamente, se resume en: "no tengo nada que esconder, todo es legal".
Luis Rubiales y Gerard Piqué están en el ojo del huracán después que el periódico, El Confidencial, publicara audios en los que se escucha a ambos personajes teniendo conversaciones sobre distintos temas: negocios con Arabia Saudita referentes a la Supercopa, una posible convocatoria del central a los Juegos Olímpicos de Tokio y un caso particular acerca del VAR.
Primero, la Federación Española de Fútbol (RFEF) negoció una comisión de 24 millones de euros para Kosmos, la empresa de eventos deportivos presidida por el defensor del Barcelona, por trasladar unos años la Supercopa de España a Arabia Saudita. Esos 24 millones, Piqué propuso repartirlos de la siguiente forma: "A ver, Rubi, sí es un tema de dinero, si ellos (Real Madrid) por 8 irían, hostia tío, se paga ocho al Madrid y ocho al Barça... a los otros se les paga 2 y 1... son 19, y os quedáis la Federación seis kilos, tío. Antes de no quedaros nada, os quedáis seis kilos. Y apretamos a Arabia Saudí y a lo mejor le sacamos... le decimos que si no, el Madrid no va... y le sacamos un palo más o dos palos más..."
Días después, Rubiales envía un audio a Piqué felicitándole por el acuerdo ya cerrado: "Geri, enhorabuena. Y no me refiero ni al partidazo de ayer ni a tu gol. Me refiero a que ya son más de las 12 y por lo tanto es firme el acuerdo con Arabia Saudí. Un abrazo, gracias por todo y aquí estoy para lo que necesites". Finalmente, se conoció que la Federación NO LE PAGÓ nada a la empresa de Piqué, pero sí le ayudó a que cobrar la comisión.
Segundo, Gerard Piqué le mandó un audio a Luis Rubiales para felicitarle por la clasificación de España a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, y de inmediato, aprovechó la ocasión para pedirle un favor: “Qué pasa, Rubi, ¿cómo estás? Estoy aquí en Bahamas y acabo de ver el partido de la sub-21 contra Polonia, ¡qué partidazo, hostia! Mira que la tenían difícil, ¿eh? ¡Dios! Cómo se han clasificado para los Juegos Olímpicos… Esta me la tienes que hacer, eh, Rubi, me la tienes que conseguir, hostia. Me hace una ilusión que te cagas jugar los Juegos Olímpicos. Y la tenemos que mantener muy en secreto, tío”.
Rubiales atiende la solicitud del defensor y promete respaldarle ante el entrenador de la selección Sub-21 de España: “Por supuesto, hay que mantenerlo en secreto y el míster [de la Fuente], si él confía, quiere y tira palante, yo encantadísimo. A mí me gustaría que vinieras hasta a la [selección] absoluta, que te necesitamos más. Yo encantado de echar una mano ahí”. Finalmente, Piqué no fue convocado a la Justa Olímpica.
Tercero, Gerard se comunica con Rubiales para quejarse por una mala decisión del VAR en un partido en Anoeta contra la Real Sociedad en la temporada 19/20: “Rubi, no han consultado el VAR y era penalti clarísimo. Y los del VAR tampoco han dicho nada. Nos han liado”. El presidente de la RFEF contesta al defensor poco después de la siguiente forma: “Sé que les han pitado uno dudoso en contra, que si es dudoso no entran ni para bien ni para mal, y sé que no han pitado uno, un agarrón a ti ¿no?, me han dicho. Pero los agarrones también, o es muy claro o tampoco entran. Pero bueno, lo veré después. Oye, si se han equivocado, tú sabes que estando yo por medio no hay ni ganas de perjudicar ni de beneficiar a nadie, ¿sabes?”.
Esta última conversación ocurrió enmedio de una disputa por el título de Liga con Real Madrid, y es que cuatro días después de ese partido en Anoeta, el Barca enfrentaba a los blancos con la obligación de ganar y el empate contra la Real Sociedad no les venía bien, por tanto, se presume que el defensor buscaba ayuda en el presidente para evitar errores arbitrales.
Hasta ahora, ninguna entidad se ha pronunciado acerca de iniciar algún tipo de investigación sobre estos casos, sin embargo, Piqué salió a aclarar todo en una extensa declaración que, básicamente, se resume en: "no tengo nada que esconder, todo es legal".