Con un breve video tanto en inglés como en español deseándole suerte a su nuevo equipo, Mauricio Pochettino oficializó su llegada a la selección de los Estados Unidos masculina. A diferencia de lo que ocurre en la mayoría de las selecciones nacionales, en Estados Unidos la selección femenil tiene mayor relevancia y éxito que su contraparte varonil.
Por: Josué López.
Por: Josué López.
A partir de hoy, en elencargado de revertir esa situación es el ex entrenador del Espanyol o el Tottenham Hotspur Mauricio Pochettino. El ciclo anterior de Greg Berhalter tuvo un éxito relativo. Lo positivo fue el regreso a una Copa del Mundo y la consagración de la llamada generación dorada comandada por futbolistas como Cristian Pulisic. Uno de los miembros de dicho futuro éxito norteamericano, Gio Reyna, tuvo serias diferencias con el anterior entrenador, más por cuestiones familiares que asuntos que tuvieran que ver con el juego. En la cancha, por otra parte, Team USA tuvo una clara hegemonía sobre la selección mexicana.
Mientras los vecinos del sur han cambiado constantemente de entrenador, Mauricio Pochettino llega a un proyecto con más recursos futbolísticos; principalmente futbolistas en las principales ligas de Europa.
Trayectoria
Como jugador, Mauricio comenzó su carrera con el New’s Old Boys de Argentina. Su camino europeo continuó en el Espanyol de Barcelona, signo en el entonces irrelevante Paris Saint Germain, un breve por de etapas en el Bordeaux de Francia y culminó su carrera donde en el mismo Espanyol.
Como seleccionado argentino, jugó 20 partidos, hizo dos goles y participó en el Mundial de Corea-Japón 2002.
Como entrenador, comenzó su camino en el Espanyol de Barcelona. Tras un par de temporadas
aceptables dio el salto a la Liga Premier de Inglaterra. Su paso por el Southampton y memorables temporadas con el Tottenham Hotspur, donde tuvo una final de Champions contra al Liverpool, lo llevaron nuevamente a Paris. A ¨Potch¨ se le confió el tratar con el tridente de Neymar, Mbapé y su compatriota Lionel Messi. La liga local, como se esperaba, se consigue, pero la obseción parisina de trascender en Europa no se concretó.
Con un 4-2-3-1 y un estilo que prioriza la retención del balón llega a su primer proyecto como seleccionador nacional. Su primer partido a cargo del Team USA será ante el rival de CONCACAF México en el Estadio Akron de Guadalajara. Se presume que días antes se jugará con un rival ¨sorpresa¨.
Sin eliminatorias que enfrentar y menos de dos años para trabajar rumbo al Mundial de 2026, el proyecto de Pochettino luce esperanzador para algunos, y una garantía de fracaso para otra corriente más resultadista.
Mientras los vecinos del sur han cambiado constantemente de entrenador, Mauricio Pochettino llega a un proyecto con más recursos futbolísticos; principalmente futbolistas en las principales ligas de Europa.
Trayectoria
Como jugador, Mauricio comenzó su carrera con el New’s Old Boys de Argentina. Su camino europeo continuó en el Espanyol de Barcelona, signo en el entonces irrelevante Paris Saint Germain, un breve por de etapas en el Bordeaux de Francia y culminó su carrera donde en el mismo Espanyol.
Como seleccionado argentino, jugó 20 partidos, hizo dos goles y participó en el Mundial de Corea-Japón 2002.
Como entrenador, comenzó su camino en el Espanyol de Barcelona. Tras un par de temporadas
aceptables dio el salto a la Liga Premier de Inglaterra. Su paso por el Southampton y memorables temporadas con el Tottenham Hotspur, donde tuvo una final de Champions contra al Liverpool, lo llevaron nuevamente a Paris. A ¨Potch¨ se le confió el tratar con el tridente de Neymar, Mbapé y su compatriota Lionel Messi. La liga local, como se esperaba, se consigue, pero la obseción parisina de trascender en Europa no se concretó.
Con un 4-2-3-1 y un estilo que prioriza la retención del balón llega a su primer proyecto como seleccionador nacional. Su primer partido a cargo del Team USA será ante el rival de CONCACAF México en el Estadio Akron de Guadalajara. Se presume que días antes se jugará con un rival ¨sorpresa¨.
Sin eliminatorias que enfrentar y menos de dos años para trabajar rumbo al Mundial de 2026, el proyecto de Pochettino luce esperanzador para algunos, y una garantía de fracaso para otra corriente más resultadista.