Las semifinales del Mundial Sub-20 dejaron un escenario histórico y una final inédita. Argentina confirmó su jerarquía, mientras que Marruecos escribió una de las páginas más sorprendentes del fútbol juvenil. En contraste, Colombia y Francia quedaron relegadas al partido por el tercer puesto tras una jornada marcada por mínimos detalles, eficacia y carácter competitivo.
Por: Mónica Delgado.
Por: Mónica Delgado.
Argentina se impuso 1-0 ante Colombia en un duelo de alta tensión disputado en Santiago. El conjunto albiceleste, ordenado y paciente, encontró el gol en el segundo tiempo a través de Mateo Silvetti, quien definió tras una jugada trabajada en el sector derecho. El equipo argentino no necesitó dominar en volumen ofensivo, sino administrar los tiempos y presionar con inteligencia en campo rival. Colombia, que venía con impulso tras eliminar rivales de peso, sufrió la ausencia de su goleador Néiser Villarreal por sanción y careció de claridad en los últimos metros. Para el equipo cafetero, la expulsión en los minutos finales selló su imposibilidad de reacción. No fue un mal partido, pero sí uno donde Argentina mostró oficio en lugar de brillo.
En Valparaíso, Marruecos protagonizó la sorpresa de la Copa al eliminar a Francia en penales tras empatar 1-1 en el tiempo reglamentario. Zabiri adelantó a los marroquíes desde el punto penal, aprovechando un error defensivo francés. Pese a la presión, Francia igualó con un tanto de Lucas Michal y llevó el partido al alargue. En la tanda desde los doce pasos, emergió la figura del tercer portero marroquí, El Meshabi, quien atajó el penal decisivo y se convirtió en héroe nacional. Marruecos, que nunca había llegado tan lejos en un Mundial juvenil, confirmó que su crecimiento no depende solo de nombres, sino de una estructura que ya compite de tú a tú con Europa.
Con estos resultados, la final enfrentará a Argentina vs Marruecos, un choque entre tradición y revelación. La Albiceleste, fiel a su historia en categorías juveniles, llega sin exuberancia pero con una estructura sólida y liderazgo táctico. Marruecos, en cambio, representa la irrupción africana desde la disciplina defensiva y el aprovechamiento de cada oportunidad. Será un partido de conceptos: posesión y paciencia contra transición y convicción.
Colombia y Francia, por su parte, disputarán el duelo por el tercer lugar. Los cafeteros, que mostraron carácter a lo largo del torneo, cierran el ciclo con sentimientos encontrados: compitieron, pero quedaron cortos en eficacia. Francia, con mayor talento individual, pagó caro su inconsistencia y su falta de contundencia. El duelo entre ambos será, más que consuelo, una prueba final de carácter.
Esta jornada confirmó que el Mundial Sub-20 ya no se define solo por potencia tradicional. Las distancias se acortan, los proyectos pesan y las selecciones que manejan detalles no los nombres llegan a las finales. Argentina buscará coronar su camino previsible. Marruecos, en cambio, irá por una gesta que hace unos años habría parecido imposible.
El título ya tiene protagonistas. La historia, todavía no.
En Valparaíso, Marruecos protagonizó la sorpresa de la Copa al eliminar a Francia en penales tras empatar 1-1 en el tiempo reglamentario. Zabiri adelantó a los marroquíes desde el punto penal, aprovechando un error defensivo francés. Pese a la presión, Francia igualó con un tanto de Lucas Michal y llevó el partido al alargue. En la tanda desde los doce pasos, emergió la figura del tercer portero marroquí, El Meshabi, quien atajó el penal decisivo y se convirtió en héroe nacional. Marruecos, que nunca había llegado tan lejos en un Mundial juvenil, confirmó que su crecimiento no depende solo de nombres, sino de una estructura que ya compite de tú a tú con Europa.
Con estos resultados, la final enfrentará a Argentina vs Marruecos, un choque entre tradición y revelación. La Albiceleste, fiel a su historia en categorías juveniles, llega sin exuberancia pero con una estructura sólida y liderazgo táctico. Marruecos, en cambio, representa la irrupción africana desde la disciplina defensiva y el aprovechamiento de cada oportunidad. Será un partido de conceptos: posesión y paciencia contra transición y convicción.
Colombia y Francia, por su parte, disputarán el duelo por el tercer lugar. Los cafeteros, que mostraron carácter a lo largo del torneo, cierran el ciclo con sentimientos encontrados: compitieron, pero quedaron cortos en eficacia. Francia, con mayor talento individual, pagó caro su inconsistencia y su falta de contundencia. El duelo entre ambos será, más que consuelo, una prueba final de carácter.
Esta jornada confirmó que el Mundial Sub-20 ya no se define solo por potencia tradicional. Las distancias se acortan, los proyectos pesan y las selecciones que manejan detalles no los nombres llegan a las finales. Argentina buscará coronar su camino previsible. Marruecos, en cambio, irá por una gesta que hace unos años habría parecido imposible.
El título ya tiene protagonistas. La historia, todavía no.
RSS Feed
