Con 35 años, el ala-pívot emitió un comunicado para informar su retiro del baloncesto profesional, afirmando que tiene un latido irregular en su corazón y teme que la situación pueda agravarse. “Es hora de poner mi salud y mi familia en primer lugar”.
Por: Alejandro Mejicanos.
Por: Alejandro Mejicanos.
En el deporte hay circunstancias que pueden frenar la carrera de un atleta, lesiones, adicciones, problemas extracancha, dificultades psicológicas… Pero hay otras situaciones muy puntuales que ponen de inmediato contra la pared a cualquiera, obligando a dar un paso definitivo al costado, especialmente, sí esa situación puede conllevar a la muerte.
Lamarcus Aldridge recién firmó contrato con los Brooklyn Nets, a finales de marzo para ser más concretos, y desde entonces, disputó cinco partidos, pero en uno de ellos sintió algo que califica como “aterrador”. El jugador que se desempeñaba como ala-pívot explicó en un comunicado compartido por él mismo en sus redes sociales, que sufre de un extraño padecimiento en el corazón y el miedo de afrontar un lapso de lucha entre la vida y la muerte, le hizo tomar una complicada decisión.
“Mi último partido lo jugué con una irregularidad en el latido. Esa noche el ritmo empeoró, lo que hizo que me preocupase más. A la mañana siguiente le conté al equipo médico del club lo que estaba pasando y estuvieron estupendos llevándome al hospital para que me hicieran un chequeo. Aunque ahora estoy mejor, lo que sentí en mi corazón aquella noche sigue siendo una de las cosas más aterradoras que he experimentado. Dicho todo esto, he tomado la difícil decisión de retirarmed de la NBA”, explica el jugador nacido en Texas en 1985.
Aldridge se incorporó a la NBA en el 2006, cuando fue seleccionado por Portland Trail Blazers en el draft. Desde entonces, firmó una trayectoria impresionante siendo parte en 7 ocasiones del All-Star Game, fue incluido cinco veces entre los mejores quintetos de la liga, aportó 19,951 puntos, 8,478 rebotes, 2,034 asistencias, 1,140 tapones y 744 robos, pero nunca logró levantar el preciado título de la NBA. Esta vez, con los Nets, parecía ser la gran oportunidad. Su equipo marcha firme en la conferencia Este y se considera serio candidato al campeonato, sin embargo, para Lamarcus ahora hay cosas más importantes: “Durante 15 años puse al baloncesto por delante. Ahora ha llegado el momento de poner mi salud y mi familia en primer lugar”.
Lamarcus Aldridge recién firmó contrato con los Brooklyn Nets, a finales de marzo para ser más concretos, y desde entonces, disputó cinco partidos, pero en uno de ellos sintió algo que califica como “aterrador”. El jugador que se desempeñaba como ala-pívot explicó en un comunicado compartido por él mismo en sus redes sociales, que sufre de un extraño padecimiento en el corazón y el miedo de afrontar un lapso de lucha entre la vida y la muerte, le hizo tomar una complicada decisión.
“Mi último partido lo jugué con una irregularidad en el latido. Esa noche el ritmo empeoró, lo que hizo que me preocupase más. A la mañana siguiente le conté al equipo médico del club lo que estaba pasando y estuvieron estupendos llevándome al hospital para que me hicieran un chequeo. Aunque ahora estoy mejor, lo que sentí en mi corazón aquella noche sigue siendo una de las cosas más aterradoras que he experimentado. Dicho todo esto, he tomado la difícil decisión de retirarmed de la NBA”, explica el jugador nacido en Texas en 1985.
Aldridge se incorporó a la NBA en el 2006, cuando fue seleccionado por Portland Trail Blazers en el draft. Desde entonces, firmó una trayectoria impresionante siendo parte en 7 ocasiones del All-Star Game, fue incluido cinco veces entre los mejores quintetos de la liga, aportó 19,951 puntos, 8,478 rebotes, 2,034 asistencias, 1,140 tapones y 744 robos, pero nunca logró levantar el preciado título de la NBA. Esta vez, con los Nets, parecía ser la gran oportunidad. Su equipo marcha firme en la conferencia Este y se considera serio candidato al campeonato, sin embargo, para Lamarcus ahora hay cosas más importantes: “Durante 15 años puse al baloncesto por delante. Ahora ha llegado el momento de poner mi salud y mi familia en primer lugar”.