Las finales de Conferencia en la NBA han arrancado con mucho dramatismo y acciones estratégicas del más alto nivel. Una canasta de DeAndre Ayton con 0.7 segundos en el reloj, le dio el triunfo al quinteto Phoenix para dejar 2-0 la serie ante Clippers, mientras tanto, Trae Young vapuleó a los Bucks.
Por: Alejandro Mejicanos.
Por: Alejandro Mejicanos.
La ausencia de Chris Paul parecía una situación complicada de afrontar para los Suns de Phoenix, pero la realidad es que en los dos juegos que van de la Final en la Conferencia Oeste frente a Los Ángeles Clippers, no le han extrañado tanto. El primer duelo lo solventaron con tablero de 120-114, y el segundo también terminó con victoria, aunque fue mucho más apretado, 104-103, definiéndose en las últimas décima de segundo.
Devin Booker cargó con el peso del equipo, aportando un triple-doble, con 40 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias. Toda transición ofensiva pasaba por el jugador de 24 años que inclusive, se vio afectado por un golpe en la nariz, sin embargo, supo reponerse y fue la clave de los Suns. A él se le unieron DeAndre Ayton con 20 puntos y Jae Crowder con 13 unidades, pero estos dos fueron los protagonistas de la acción clave sobre las postrimerías del partido.
Los Clippers hicieron su juego, mejoraron notablemente los errores defensivos del primer partido y atacaron con mayor solvencia, encabezados por Paul George que se anotó 34 puntos, más 24 de Reggie Jackson y los 10 rebotes que cogió Nicolás Batum para continuar con el balón en su poder. El encuentro se decidió en los minutos finales, con cierto protagonismo de los árbitros, revisando cada jugada dudosa. Cuando los angelinos tuvieron una ventaja mínima en el tablero, Paul George recibió una falta, yendo a la línea de castigo, pero no pudo concretar sus dos tiros libres, dejando la oportunidad para que los Suns, con 0.7 en el reloj, armaran una combinación brutal. Crowder le puso el balón justo a la par de la canasta a Ayton que venía impulsado para clavarla y darle la victoria a los Phoenix. La serie está 2-0 y continuará mañana en el Staples Center.
Por su parte, los Atlanta Hawks se plantaron en el Fiserv Forum de Milwaukee y de la mano de Trae Young, se llevaron el primer capítulo de la serie, ante unos Bucks que sufrieron desconcentraciones en momentos puntuales. El “joven” de 22 años nacido en Texas se convirtió en una verdadera máquina de puntos y asistencias, 48 unidades y 11 pases decisivos, además 7 rebotes que le permitieron a su equipo dominar a un rival que estaba siendo alentado por su afición.
Giannis Antetokounmpo y Jrue Holiday fueron los hombres de mayor peso en los Bucks, entre los dos completaron 67 puntos, haciendo notar su buen ataque, y encima, retrocedieron bastante para echar una mano en defensa capturando varios rebotes y algunos tapones. La situación para Milwaukee se puso difícil en el tramo final, donde Young se creció y ni Connaughton o Middleton pudieron detenerle. Le hicieron faltas personales para buscar fallos en la línea de tiros libres, pero tampoco falló desde ahí. De hecho, Atlanta anotó 14 de 16 tiros libres, los Bucks solamente 11 de 14, aunque los Hawks lamentaron 11 perdidas de balón, 3 más que Milwaukee.
El tablero se cerró 113-116 y Atlanta consiguió la primera victoria de su historia jugando una Final de Conferencia. Momento emblemático para la franquicia que busca llegar a la gran Final de la NBA. Los Bucks deberán reponerse rápidamente de este golpe porque el viernes afrontan el segundo juego e irse a Atlanta con un 0-2 abajo podría ser catastrófico.
Devin Booker cargó con el peso del equipo, aportando un triple-doble, con 40 puntos, 13 rebotes y 11 asistencias. Toda transición ofensiva pasaba por el jugador de 24 años que inclusive, se vio afectado por un golpe en la nariz, sin embargo, supo reponerse y fue la clave de los Suns. A él se le unieron DeAndre Ayton con 20 puntos y Jae Crowder con 13 unidades, pero estos dos fueron los protagonistas de la acción clave sobre las postrimerías del partido.
Los Clippers hicieron su juego, mejoraron notablemente los errores defensivos del primer partido y atacaron con mayor solvencia, encabezados por Paul George que se anotó 34 puntos, más 24 de Reggie Jackson y los 10 rebotes que cogió Nicolás Batum para continuar con el balón en su poder. El encuentro se decidió en los minutos finales, con cierto protagonismo de los árbitros, revisando cada jugada dudosa. Cuando los angelinos tuvieron una ventaja mínima en el tablero, Paul George recibió una falta, yendo a la línea de castigo, pero no pudo concretar sus dos tiros libres, dejando la oportunidad para que los Suns, con 0.7 en el reloj, armaran una combinación brutal. Crowder le puso el balón justo a la par de la canasta a Ayton que venía impulsado para clavarla y darle la victoria a los Phoenix. La serie está 2-0 y continuará mañana en el Staples Center.
Por su parte, los Atlanta Hawks se plantaron en el Fiserv Forum de Milwaukee y de la mano de Trae Young, se llevaron el primer capítulo de la serie, ante unos Bucks que sufrieron desconcentraciones en momentos puntuales. El “joven” de 22 años nacido en Texas se convirtió en una verdadera máquina de puntos y asistencias, 48 unidades y 11 pases decisivos, además 7 rebotes que le permitieron a su equipo dominar a un rival que estaba siendo alentado por su afición.
Giannis Antetokounmpo y Jrue Holiday fueron los hombres de mayor peso en los Bucks, entre los dos completaron 67 puntos, haciendo notar su buen ataque, y encima, retrocedieron bastante para echar una mano en defensa capturando varios rebotes y algunos tapones. La situación para Milwaukee se puso difícil en el tramo final, donde Young se creció y ni Connaughton o Middleton pudieron detenerle. Le hicieron faltas personales para buscar fallos en la línea de tiros libres, pero tampoco falló desde ahí. De hecho, Atlanta anotó 14 de 16 tiros libres, los Bucks solamente 11 de 14, aunque los Hawks lamentaron 11 perdidas de balón, 3 más que Milwaukee.
El tablero se cerró 113-116 y Atlanta consiguió la primera victoria de su historia jugando una Final de Conferencia. Momento emblemático para la franquicia que busca llegar a la gran Final de la NBA. Los Bucks deberán reponerse rápidamente de este golpe porque el viernes afrontan el segundo juego e irse a Atlanta con un 0-2 abajo podría ser catastrófico.