EFE - El luchador mexicano Pedro 'Perro' Aguayo Jr, agonizó por unos minutos y sin atención médica antes de morir en las primera horas de hoy como consecuencia de un traumatismo craneoencefálico sufrido en un combate.
En un vídeo que circula en las redes sociales se comprueba que después de recibir una patada voladora de "Rey Misterio" en una función en Tijuana, norte del país, el gladiador queda colgado en la segunda cuerda ya sin conocimiento mientras el round continúa.
Al tiempo que algunos morbosos tomaban fotografías del cuerpo desvanecido, las acciones en el ring siguieron y la única atención que tuvo el peleador durante casi dos minutos fue la de un compañero que lo movió, le habló y trató de reanimarlo sin resultados.
La arena sede de la función no tenía servicios médicos de emergencia y pasaron algunos minutos antes de que Aguayo fuera trasladado, ya inerte, a una camilla, mientras personal pedía a gritos una ambulancia avanzada.
El vídeo muestra al gladiador con sangre que goteaba debajo de su ojo derecho y se ve que al concluir el asalto, le ponen una especie de tubo para ayudarlo a respirar, pero el deportista no reacciona. Según fuentes cercanas al luchador, los médicos intentaron reanimar a Aguayo durante alrededor de una hora hasta que fue declarado muerto.
Aficionados, comentaristas deportivos y personal vinculado a la lucha libre en México ha criticado las pocas condiciones en la arena sede de la función para atender a un accidentado en un deporte violento en el que hay altas posibilidades de accidente.
Aguayo, de 35 años de edad y heredero del histórico luchador Perro Aguayo, tomó como luchador el mismo nombre de su padre, y desarrolló una carrera de veinte años sobre los cuadriláteros de la lucha libre en México.
Considerado una de las disciplinas más populares de México en la que se combina deporte y show, la lucha libre ha registrado con anterioridad otros accidentes fatales sobre los cuadriláteros, como la muerte del luchador Oro en 1993 tras de recibir una llave directa al cuello.
Al tiempo que algunos morbosos tomaban fotografías del cuerpo desvanecido, las acciones en el ring siguieron y la única atención que tuvo el peleador durante casi dos minutos fue la de un compañero que lo movió, le habló y trató de reanimarlo sin resultados.
La arena sede de la función no tenía servicios médicos de emergencia y pasaron algunos minutos antes de que Aguayo fuera trasladado, ya inerte, a una camilla, mientras personal pedía a gritos una ambulancia avanzada.
El vídeo muestra al gladiador con sangre que goteaba debajo de su ojo derecho y se ve que al concluir el asalto, le ponen una especie de tubo para ayudarlo a respirar, pero el deportista no reacciona. Según fuentes cercanas al luchador, los médicos intentaron reanimar a Aguayo durante alrededor de una hora hasta que fue declarado muerto.
Aficionados, comentaristas deportivos y personal vinculado a la lucha libre en México ha criticado las pocas condiciones en la arena sede de la función para atender a un accidentado en un deporte violento en el que hay altas posibilidades de accidente.
Aguayo, de 35 años de edad y heredero del histórico luchador Perro Aguayo, tomó como luchador el mismo nombre de su padre, y desarrolló una carrera de veinte años sobre los cuadriláteros de la lucha libre en México.
Considerado una de las disciplinas más populares de México en la que se combina deporte y show, la lucha libre ha registrado con anterioridad otros accidentes fatales sobre los cuadriláteros, como la muerte del luchador Oro en 1993 tras de recibir una llave directa al cuello.