El cuerpo técnico encabezado por Hugo Pérez, realizó un plan de visorias en distintas zonas del país centroamericano, con el objetivo de observar jugadores jóvenes que puedan conformar una Selección Sub-15 y conducirles en un proceso a largo plazo. Más de 500 chicos fueron evaludos.
Por: Alejandro Mejicanos.
Por: Alejandro Mejicanos.
En épocas anteriores se solía escuchar la pregunta: “¿Y por qué no buscan chicos con talento en los pueblos o cantones?” Pues justo eso decidió realizar el cuerpo técnico de la Selección de El Salvador. Encabezados por Hugo Pérez, la semana anterior se llevó a cabo distintas visorias para jóvenes nacidos entre los años 2006 y 2007, que tengan el deseo de triunfar en el fútbol y por supuesto, vestir con orgullo la camiseta azul y blanco.
San Miguel, Santa Rosa de Lima, San Salvador, Soyapango, Usulután, Ahuachapán y Chalatenango fueron las zonas en las que se observó a más de 500 jugadores, de los que se planea seleccionar a la mayor cantidad posible según sus cualidades, y luego hacer un recorte para quedarse con 4 grupos de 20 a 22 jugadores. Estos grupos trabajarán con un sistema de microciclos en los que se les enseñará los mismos conceptos técnicos y tácticos, que más tarde, demostrarán en una cuadrangular para ir definiendo los 30 o 35 chicos que conformarán la Selección Sub-15.
Según explicó Juan Carlos Serrano, miembro del cuerpo técnico nacional, esta es la segunda ronda de visorias que se realizan en el país. Durante la primera se eligió a 62 a jugadores del occidente, centro y oriente, pero luego se consideró extender la visoria para observar a muchos más jóvenes con talento.
Diego Henríquez, César Cubías, William Renderos Iraheta, Efraín Burgos, Pablo Rodas y Adolfo Menénez complementan el equipo de ojeadores que están cimentando desde ya las bases para un futuro alentador en el deporte salvadoreño.
San Miguel, Santa Rosa de Lima, San Salvador, Soyapango, Usulután, Ahuachapán y Chalatenango fueron las zonas en las que se observó a más de 500 jugadores, de los que se planea seleccionar a la mayor cantidad posible según sus cualidades, y luego hacer un recorte para quedarse con 4 grupos de 20 a 22 jugadores. Estos grupos trabajarán con un sistema de microciclos en los que se les enseñará los mismos conceptos técnicos y tácticos, que más tarde, demostrarán en una cuadrangular para ir definiendo los 30 o 35 chicos que conformarán la Selección Sub-15.
Según explicó Juan Carlos Serrano, miembro del cuerpo técnico nacional, esta es la segunda ronda de visorias que se realizan en el país. Durante la primera se eligió a 62 a jugadores del occidente, centro y oriente, pero luego se consideró extender la visoria para observar a muchos más jóvenes con talento.
Diego Henríquez, César Cubías, William Renderos Iraheta, Efraín Burgos, Pablo Rodas y Adolfo Menénez complementan el equipo de ojeadores que están cimentando desde ya las bases para un futuro alentador en el deporte salvadoreño.