La atleta siria Yusra Mardini ha logrado ser nadadora olímpica en Río 2016, pese a que hace un año nadaba por necesidad para llegar a la isla de Lesbos.
Por Miguel Gámez
Por Miguel Gámez
Tras huir de siria por la guerra civil, llegó a Turquía, donde se introdujo a una embarcación con seis personas, rumbo a Europa.
Tras treinta minutos de viaje, el motor de la embarcación falló, quedando en pleno mar egeo. Mardini decidió lanzarse al agua y empujar el bote hasta encontrar la ayuda que tanto necesitaban en aquellos momentos, la cual encontraron en Lesbos.
Aquella inocente joven de dieciocho años salvó la vida de sus acompañantes. Nadie imaginó que un año después estaría compitiendo en los juegos olímpicos, Río 2016.
La nadadora que pertenece al equipo olímpico de refugiados, ha ganado su serie de 100 metros mariposa. Lejos está de morder una medalla de oro, pero su historia sí está arriba del pódium.
Tras treinta minutos de viaje, el motor de la embarcación falló, quedando en pleno mar egeo. Mardini decidió lanzarse al agua y empujar el bote hasta encontrar la ayuda que tanto necesitaban en aquellos momentos, la cual encontraron en Lesbos.
Aquella inocente joven de dieciocho años salvó la vida de sus acompañantes. Nadie imaginó que un año después estaría compitiendo en los juegos olímpicos, Río 2016.
La nadadora que pertenece al equipo olímpico de refugiados, ha ganado su serie de 100 metros mariposa. Lejos está de morder una medalla de oro, pero su historia sí está arriba del pódium.