Colchoneros y merengues obtuvieron victorias en la fecha 37 de la Liga Española, por lo que continúan a la misma distancia. Barcelona cayó en casa y están totalmente descartadas sus opciones por el título.
Por: Alejandro Mejicanos.
Por: Alejandro Mejicanos.
Ya se sabía que la carrera por la Liga estaba encabezada por los dos equipos de la capital española, Barcelona aún conservaba una muy leve esperanza, pero está jornada 37 que disputó todos los partidos a la misma hora, dejó claro que el campeón será de Madrid y hoy por hoy, el trofeo ya tiene muchos tintes rojiblancos, pero no siempre las cosas son “color de rosa”…
El conjunto del “Cholo” tuvo que sufrir, quizá hasta sudar helado y aumentar la frecuencia cardíaca, después de remontar en los últimos 10 minutos un partido que Osasuna le tenía bastante complicado. Ante Budimir puso en ventaja a los de Pamplona con un frentazo a 15’ del final, pero en el 82’, Joao Félix se sacó un pase excepcional de chistera para el ingreso en velocidad de Renan Lodi y el lateral brasileño fusiló al guardameta rival, firmando el empate. Y cuando el reloj mostraba 88’, un balón retrasado de Carrasco le llegó perfecto a Luis Suárez para rematar suave, abajo, imposible de atajar y entonces, todos a festejar porque era el gol de la victoria y “casi, casi” el campeonato.
Mientras tanto en San Mamés, el Real Madrid visitaba al Athletic de Bilbao, uno de esos equipos que de pronto dan gratas sorpresas e inclusive, golpes de autoridad. Esta vez, no fue así, a pesar que aguantaron el 0-0 durante más de una hora de partido. Casemiro remató un balón al travesaño y ese fue el primer gran aviso de gol, porque un par de minutos después, concretamente al 68’, el mismo contención brasileño envió un centro para Nacho Fernández que apareció sobre segundo poste anotando el único tanto del partido. Con eso, el Real Madrid llegó a 81 puntos, dos menos que el Atleti.
Atrás se quedó el Barca con 76, luego de sumar la segunda derrota en los últimos 5 partidos, de hecho, en esos 5 duelos solamente ganó en Mestalla. El Celta de Vigo, con doblete de Santi Mina, fulminó las pocas esperanzas que aún guardaban los aficionados culé, y lo único que les quedó para “celebrar” es que Messi anotó su gol número 30 en la Liga y terminará como máximo romperredes.
La próxima jornada se define todo. Los rojiblancos visitarán a un Valladolid que se juega el descenso, por su parte, los de Zidane recibirán en casa a un Villarreal con la mente puesta en la final de Europa League. La Liga se quedará en Madrid, pero veremos sí viaja a las vitrinas del Wanda Metropolitano o las nuevas del Santiago Bernabeú.
El conjunto del “Cholo” tuvo que sufrir, quizá hasta sudar helado y aumentar la frecuencia cardíaca, después de remontar en los últimos 10 minutos un partido que Osasuna le tenía bastante complicado. Ante Budimir puso en ventaja a los de Pamplona con un frentazo a 15’ del final, pero en el 82’, Joao Félix se sacó un pase excepcional de chistera para el ingreso en velocidad de Renan Lodi y el lateral brasileño fusiló al guardameta rival, firmando el empate. Y cuando el reloj mostraba 88’, un balón retrasado de Carrasco le llegó perfecto a Luis Suárez para rematar suave, abajo, imposible de atajar y entonces, todos a festejar porque era el gol de la victoria y “casi, casi” el campeonato.
Mientras tanto en San Mamés, el Real Madrid visitaba al Athletic de Bilbao, uno de esos equipos que de pronto dan gratas sorpresas e inclusive, golpes de autoridad. Esta vez, no fue así, a pesar que aguantaron el 0-0 durante más de una hora de partido. Casemiro remató un balón al travesaño y ese fue el primer gran aviso de gol, porque un par de minutos después, concretamente al 68’, el mismo contención brasileño envió un centro para Nacho Fernández que apareció sobre segundo poste anotando el único tanto del partido. Con eso, el Real Madrid llegó a 81 puntos, dos menos que el Atleti.
Atrás se quedó el Barca con 76, luego de sumar la segunda derrota en los últimos 5 partidos, de hecho, en esos 5 duelos solamente ganó en Mestalla. El Celta de Vigo, con doblete de Santi Mina, fulminó las pocas esperanzas que aún guardaban los aficionados culé, y lo único que les quedó para “celebrar” es que Messi anotó su gol número 30 en la Liga y terminará como máximo romperredes.
La próxima jornada se define todo. Los rojiblancos visitarán a un Valladolid que se juega el descenso, por su parte, los de Zidane recibirán en casa a un Villarreal con la mente puesta en la final de Europa League. La Liga se quedará en Madrid, pero veremos sí viaja a las vitrinas del Wanda Metropolitano o las nuevas del Santiago Bernabeú.