EFE - El jardinero puertorriqueño Carlos Beltrán volvió a mostrar todo su poder ofensivo en la competición de la fase final al pegar jonrón decisivo que ayudó a los Cardenales de San Luis a ganar por 9-1 a los Piratas de Pittsburgh en el primer partido de la serie de división de la Liga Nacional.
Beltrán, de 36 años, pegó cuadrangular espectacular de tres carreras que inicio el racimo de siete anotaciones que lograron los Cardenales en en el tercer episodio que serían decisivas a la hora de conseguir la victoria y la ventaja de 1-0 en la serie al mejor de cinco.
El toletero puertorriqueño, que nunca ha disputado una Serie Mundial, volvió a demostrar toda la clase que tiene con el bate en las manos cuando llega la hora de la verdad de la fase final.
Beltrán conectó un batazo que hizo viajar a la pelota por encima de la valla del jardín derecho y puso a San Luis con la ventaja, que ya no se dejaría arrebatar el resto del partido.
El cuadrangular de Beltrán fue el segundo más largo conectado por un zurdo en los ocho años de existencia del Busch Stadium, el campo de los Cardenales.
Beltrán llegó a los 15 cuadrangulares, 10 dobles y 28 impulsadas en 35 juegos de la fase final, además de haber anotado 40 carreras y el mismo número de base robadas.
El toletero puertorriqueño empató con el legendario Babe Ruth en octavo lugar de la lista de los peloteros que tienen la mejor marca de jonrones en la competición de la fase final.
Matt Carpenter, el primer bate de los Cardenales, calificó a Beltrán como el auténtico “Mister Octubre”.
“Es como nuestra arma secreta cuando se trata de la fase final, siempre responde”, declaró Carpenter.
“Hay gente que tiene esa capacidad para hacerse presente en juegos importantes y él es uno de ellos”.
Además, los Cardenales también tuvieron el montículo a su lanzador estrella Adam Wainwright que como se esperaba silenció a los Piratas, cubriendo siete entradas con un dominio completo sobre los bateadores del equipo de Pittsburgh.
Wainwright sigue invicto en la fase final, ahora con marca de 3-0 y 2.27 de efectividad en 14 apariciones, cinco de las cuales son aperturas.
El abridor estrella de los Cardenales aceptó una carrera y tres imparables en siete entradas que estuvo en el montículo, no dio base por bolas y sacó nueve ponches.
El derecho compartió el liderato de su circuito con 19 victorias este año y cerró 4-0 en sus últimas cinco salidas.
Como primero al bate en el tercero, Wainwright también fue quien puso en marcha el episodio arrollador de los Cardenales al negociar una base por bolas en cuenta de 3-2.
El jonrón de Beltrán trajo las primeras carreras, y luego Jon Jay recibió el boleto con las bases llenas.
El antesalista David Freese aportó un sencillo de dos carreras que limpió las almohadillas cuando el tiro del jardinero derecho Marlon Byrd al plato fue desviado.
“Poder haber dado un buen primer paso y jugando tan bien, creo que eso ayuda mucho a nuestra confianza”, declaró el piloto de los Cardenales, Mike Matheny. “Nos permite tomar algo de impulso, y eso es importantísimo cuando se trata de una serie de cinco juegos”.
Los primeros ocho bateadores de los Cardenales lograron alcanzar base en el tercer episodio, lo que obligó que el abridor estelar de los Piratas, A.J. Burnett, tuviese que dejar el montículo. Burnett registró la segunda apertura más corta en la carrera de los Piratas, y lo poco que aportó desde el montículo dejó sin opciones a su equipo a la hora de intentar la remontada.
“El juego número 164 ha sido un golpe muy fuerte para nosotros”, admitió Clint Hurdle, piloto de los Piratas. “Una de las cosas en las que somos buenos es no abrumarse”.
Lance Lynn (15-10) abrirá por los Cardenales contra el novato Gerrit Cole (10-7) en el segundo juego el viernes.
Los Piratas, tras poner fin a una sequía de 21 años sin participar en la fase final, parecían llegar a la serie divisional preparados después de derrotar a los Rojos en el juego de comodín de la Nacional.
Pero su ofensiva nunca puso en aprietos a Wainwright, en un juego en el que apenas conectaron cuatro imparables.
Su única carrera fue mediante un jonrón solitario del tercera base dominicano Pedro Alvarez al inicio de la quinta entrada.
Además, los Piratas tampoco tuvieron una defensa consistente y cometieron tres errores.
El relevista dominicano Carlos Martínez, de los Cardenales, realizó la mejor jugada.
Sin balance, Martínez hizo un tiro desde la raya de tercera a la inicial para sacar “out” al receptor Russell Martin.
El toletero puertorriqueño, que nunca ha disputado una Serie Mundial, volvió a demostrar toda la clase que tiene con el bate en las manos cuando llega la hora de la verdad de la fase final.
Beltrán conectó un batazo que hizo viajar a la pelota por encima de la valla del jardín derecho y puso a San Luis con la ventaja, que ya no se dejaría arrebatar el resto del partido.
El cuadrangular de Beltrán fue el segundo más largo conectado por un zurdo en los ocho años de existencia del Busch Stadium, el campo de los Cardenales.
Beltrán llegó a los 15 cuadrangulares, 10 dobles y 28 impulsadas en 35 juegos de la fase final, además de haber anotado 40 carreras y el mismo número de base robadas.
El toletero puertorriqueño empató con el legendario Babe Ruth en octavo lugar de la lista de los peloteros que tienen la mejor marca de jonrones en la competición de la fase final.
Matt Carpenter, el primer bate de los Cardenales, calificó a Beltrán como el auténtico “Mister Octubre”.
“Es como nuestra arma secreta cuando se trata de la fase final, siempre responde”, declaró Carpenter.
“Hay gente que tiene esa capacidad para hacerse presente en juegos importantes y él es uno de ellos”.
Además, los Cardenales también tuvieron el montículo a su lanzador estrella Adam Wainwright que como se esperaba silenció a los Piratas, cubriendo siete entradas con un dominio completo sobre los bateadores del equipo de Pittsburgh.
Wainwright sigue invicto en la fase final, ahora con marca de 3-0 y 2.27 de efectividad en 14 apariciones, cinco de las cuales son aperturas.
El abridor estrella de los Cardenales aceptó una carrera y tres imparables en siete entradas que estuvo en el montículo, no dio base por bolas y sacó nueve ponches.
El derecho compartió el liderato de su circuito con 19 victorias este año y cerró 4-0 en sus últimas cinco salidas.
Como primero al bate en el tercero, Wainwright también fue quien puso en marcha el episodio arrollador de los Cardenales al negociar una base por bolas en cuenta de 3-2.
El jonrón de Beltrán trajo las primeras carreras, y luego Jon Jay recibió el boleto con las bases llenas.
El antesalista David Freese aportó un sencillo de dos carreras que limpió las almohadillas cuando el tiro del jardinero derecho Marlon Byrd al plato fue desviado.
“Poder haber dado un buen primer paso y jugando tan bien, creo que eso ayuda mucho a nuestra confianza”, declaró el piloto de los Cardenales, Mike Matheny. “Nos permite tomar algo de impulso, y eso es importantísimo cuando se trata de una serie de cinco juegos”.
Los primeros ocho bateadores de los Cardenales lograron alcanzar base en el tercer episodio, lo que obligó que el abridor estelar de los Piratas, A.J. Burnett, tuviese que dejar el montículo. Burnett registró la segunda apertura más corta en la carrera de los Piratas, y lo poco que aportó desde el montículo dejó sin opciones a su equipo a la hora de intentar la remontada.
“El juego número 164 ha sido un golpe muy fuerte para nosotros”, admitió Clint Hurdle, piloto de los Piratas. “Una de las cosas en las que somos buenos es no abrumarse”.
Lance Lynn (15-10) abrirá por los Cardenales contra el novato Gerrit Cole (10-7) en el segundo juego el viernes.
Los Piratas, tras poner fin a una sequía de 21 años sin participar en la fase final, parecían llegar a la serie divisional preparados después de derrotar a los Rojos en el juego de comodín de la Nacional.
Pero su ofensiva nunca puso en aprietos a Wainwright, en un juego en el que apenas conectaron cuatro imparables.
Su única carrera fue mediante un jonrón solitario del tercera base dominicano Pedro Alvarez al inicio de la quinta entrada.
Además, los Piratas tampoco tuvieron una defensa consistente y cometieron tres errores.
El relevista dominicano Carlos Martínez, de los Cardenales, realizó la mejor jugada.
Sin balance, Martínez hizo un tiro desde la raya de tercera a la inicial para sacar “out” al receptor Russell Martin.