El escolta, Dwyane Wade, eligió a los Bulls de su natal Chicago después de 13 temporadas con los Heat de Miami.
Por Miguel Gámez
Por Miguel Gámez
Wade, no llegó a un acuerdo con los Heat, tras haberse reunido en un último intento por retenerlo ofreciéndole un contrato por dos años y 40 millones de dólares. Sin embargo, antes el jugador se había reunido con dirigentes de los Buks de Milwaukee y de los Nuggets de Denver, que le ofrecieron más de 50 millones de dólares pero terminó aceptando el ofrecimiento de los Bulls de un salario de 23,5 millones de dólares por temporada, aunque se desconoce si hubo una reunión personal con sus dirección.
El veterano escolta abandona las filas del equipo que lo llevó a la NBA, ganó tres títulos de liga, incluido el de la temporada del 2006 cuando lo eligieron MVP de las Finales, además de formar 12 veces del equipo de la Conferencia Este en el Partido de las Estrellas.
“Esta decisión que he tomado no ha sido fácil pero creo que es la correcta”, comentó Wade en una carta dirigida a los Heat.
“Ver a los Bulls, me inspiró desde una edad temprana para perseguir mi sueño de convertirme en jugador”, escribió Wade en la carta.
“Mis recuerdos más gratos son los de mi padre, quien jugaba baloncesto en las canchas de la escuela primaria Fermi y quien ayudó en el desarrollo de mi juego en el Centro Recreativo Blue Island. Nunca he olvidado de dónde vine, y estoy agradecido por tener una oportunidad de jugar con el equipo que ha alimentado mi amor por este deporte”. Concluyó.
El veterano escolta abandona las filas del equipo que lo llevó a la NBA, ganó tres títulos de liga, incluido el de la temporada del 2006 cuando lo eligieron MVP de las Finales, además de formar 12 veces del equipo de la Conferencia Este en el Partido de las Estrellas.
“Esta decisión que he tomado no ha sido fácil pero creo que es la correcta”, comentó Wade en una carta dirigida a los Heat.
“Ver a los Bulls, me inspiró desde una edad temprana para perseguir mi sueño de convertirme en jugador”, escribió Wade en la carta.
“Mis recuerdos más gratos son los de mi padre, quien jugaba baloncesto en las canchas de la escuela primaria Fermi y quien ayudó en el desarrollo de mi juego en el Centro Recreativo Blue Island. Nunca he olvidado de dónde vine, y estoy agradecido por tener una oportunidad de jugar con el equipo que ha alimentado mi amor por este deporte”. Concluyó.